viernes, 30 de diciembre de 2011
Mendigos
martes, 13 de diciembre de 2011
El bosón de Higgs
El bosón de Higgs es la nueva representación intuitiva de Dios. No bromeo. Supone el elemento creativo de la materia, de la masa, desde las fuerzas electromagnéticas, generando en las sucesivas transformaciones cuánticas la vida. Me llama mucho la atención que ahora, en estos tiempos de negación divina, irrumpa el fenómeno ultraestructural de la Física más avanzada. Estos teóricos son lo mismo que los místicos del ayer. Son seres intuitivos al más alto nivel, profundizando el pensamiento de manera similar a la de los grandes santos de todas las religiones. Aldous Huxley en su libro Filosofía Perenne describe con acierto y maestría la concurrencia común de todas las experiencias místicas, y evidencia que el soplo interior de la noción de Dios se halla en todas las aproximaciones de las diversas doctrinas teológicas. Eckart, Santa Teresa de Jesús, los poetas sufíes, los shivaíticos, los budistas, etc, se basan en un mismo trayecto hacia la perfección que no puede ser entendida más que con la fe. Recomiendo el libro. Más allá de cualquier tesis reduccionista del ateísmo contemporáneo debe reflexionarse, a la luz de estos recientes postulados de las subpartículas, acerca de la Creación. No pueden tomarse más que como metafóricos los antiguos textos sagrados pero no como ficticios, puesto que se han escrito desde la intuición para un tiempo de simpleza social, para hacer comprensibles los fenómenos sobrenaturales al vulgo. Aún el bosón de Higgs es sobrenatural, y lo será durante muchos y muchos siglos. Se le siente con una emoción indescriptible de respeto temor y misterio. Es una auténtica revelación de la existencia de otras dimensiones omnipotentes, digamos de Dios.
Difícilmente seremos capaz de demostrar experimentalmente su genuina naturaleza, la del bosón. Hoy por hoy estamos más cerca de ese enigma, pero aún infinitamente lejos de descifrarlo en su complejidad. El efecto del bosón es el mismo que el de los milagros, que redundan en la magnificencia y en la imposibilidad de comprenderlos. Creo que la progresiva adopción de la religión cosmofísica es un hecho evolutivo del ser humano y no enfrentado a las religiones clásicas. Todas vienen a revelar lo mismo, todas tienen su cúmulo de aderezos simbólicos que refuerzan la genuina idea del Ser Supremo, ángeles, demonios, leyendas, apariciones, como la disciplina científica tiene sus hipótesis, teoría de las supercuerdas, de la incertidumbre orbital, de los estados de la energía, y la propia imposibilidad de resolver ecuaciones de espacio-tiempo a nivel estelar. Estamos ante el mismo fenómeno sobrecogedor y lejano de las primitivas civilizaciones: comprender a Dios. Y conocerlo.
Ignoro si las últimas palabras, estertorosas, que Albert Einstein pronunció a la enfermera que le atendía tenían algo que ver con todo esto. Nunca se revelaron, posiblemente fueron ininteligibles en el momento en el que la rotura de un aneurisma aórtico le dejaba sin fluido vital. Tal vez… en esos instantes alguien muy inexplicable andaba por allí.
viernes, 25 de noviembre de 2011
TERRA INCOGNITA S.A.
jueves, 10 de noviembre de 2011
In eternum
lunes, 31 de octubre de 2011
Noche de Difuntos
sábado, 22 de octubre de 2011
El comunicado
sábado, 15 de octubre de 2011
Gauche Divine
domingo, 9 de octubre de 2011
AÑOS DE VINO Y ROSAS
martes, 27 de septiembre de 2011
VICENTE
domingo, 25 de septiembre de 2011
AGNOSTICISMO TEOLOGICO
viernes, 16 de septiembre de 2011
Terapia de Maggot
El término maggot significa gusano, larva, y desde la Antigúedad existen referencias de sus aplicaciones en el tratamiento de úlceras cutáneas con componente de necrosis. Las larvas de la mosca Lucilia sericata poseen, específicamente, la propiedad de producir unas larvas que actúan devorando el tejido desvitalizado o muerto, por lo que dicha propiedad le ha valido, al insecto, el sobrenombre de mosca cirujana. La aplicación terapéutica de dicho método ha sido cuestionada en algunas épocas, pero en la actualidad se emplea en miles de hospitales, sobre todo norteamericanos.
domingo, 21 de agosto de 2011
UN INSTANTE DE FE
martes, 19 de julio de 2011
JAVIER AMOR
sábado, 16 de julio de 2011
DELICUESCENCIAS
sábado, 9 de julio de 2011
CAN BARÓ
martes, 5 de julio de 2011
SGAE
sábado, 11 de junio de 2011
¿La Cultura en la UCI?
¿Se ha muerto la Cultura, o sólo está en coma?. No se mueve, no abre los ojos, pero ¿respira?. Desde luego que algo grave le sucede. Es inquietante.
Allá por los años de la oprobiosa, la Cultura merodeaba y gozaba de buena salud, amenazada pero noenferma. Años en los que floreció, en los que germinó dando hermosos frutos, como si la tierra quemada aportase nutrientes fértiles a su savia, una savia muy sabia. Creció y se multiplicó en la escasez, porque la escasez aligera los pasos en busca de todo, y en esa precariedad se recorrieron todos los caminos. Desde los más grandes hasta los más anónimos desplegaron sus mentes y levantaron la casa en el solar yermo de la época. Hoy, lamentablemente, las cosas son bien distintas.
Aquellos fueron años sudorosos y de frío helador, en los que la sombra de una higuera y el fuego de una hoguera nos redimían de las inclemencias oficiales, y en esos corros se la alimentó de emociones, de ideas, y de acciones. Un soplo de inspiración se trasladaba, sin intermediarios, a la obra. Una genialidad recorría un escarpado sendero y alcanzaba la cima del triunfo esencial, sin subvenciones. Por entonces, una legión de defensores ofreció sus hombros para levantarla, y en ese colosal esfuerzo, casi con el estómago vacío, se alzó la Cultura que habitó entre nosotros.
Hoy es otra cosa. Arte humillante, literatura pestilente, música gutural. Bufones recogiendo monedas, inventores del mal vivir, poetas dela basura. Y detrás, en la tramoya, gentes que nada saben de Cultura repartiendo cazos de garbanzos a unos y sirviendo manjares a otros, prestando camisas, trapicheando como peristas de mirada torva. Son los electos de la nada que dirigen el olympo de las voluntades.
La Cultura se nos está muriendo. De nada sirven las apócrifas oraciones de los alternativos, son tan fútiles como las letanías de los meapilas, ni las ingentes sumas que se reparten los démocratas en la cueva de Alí Babá para levantar ídolos con pies de barro. Los antiguos mecenas han sido barridos por cargos públicos, sin oficio pero con beneficio. Ni un solo trazo de Miguel Angel, ni un solo color de Vincent, ni un solo verso de William, ni una armonía de Wolfgang, ni una rabia de Pablo, ni una curva de Antoni, todo borroso todo disonante, y el ser humano, que busca siempre y exclusivamente la luz, se está quedando a oscuras. En la oscuridad cabe bien todo lo falso, y es casi imposible encontrar lo auténtico.
domingo, 29 de mayo de 2011
sábado, 26 de marzo de 2011
EL BELLAMAR
Dicen que hasta una noche actuó Antonio Machín, y entre canciones y susurros, durante medio siglo, se enamoraron muchas parejas. Seguramente por eso ha ido creciendo su leyenda urbana, tan romántica que hasta yo mismo la percibí en mi preadolescencia. Todos los días de aquel verano, al llegar a la playa, contemplaba su aspecto seductor, como un reclamo de sensualidad mediterránea, y los domingos por la tarde, desde sus aledaños, se escuchaba a la orquesta interpretando "Bésame mucho" o "La vie en rose" con ese ritmo deliuescente que reverberaba en el aire sereno del atardecer.
Todos hemos tenido nuestro planeta de amor inexplorado, y el mío fue el Bellamar. No está nada mal encomendarse a su advocación romántica, como si de un virtuoso lugar se tratase. A fin de cuentas el amor es algo divino y humano.
sábado, 19 de marzo de 2011
¿NOS REMUERDE LA ENERGÍA?
Es cierto que la Humanidad se ha desarrollado en la precariedad de la energía, pero ello ha llevado mucho tiempo. Hasta el siglo XIX no se descubre la termodinámica, y es entonces cuando se inicia el gran despegue energético. Carbón, máquina de vapor, electricidad, combustibles fósiles, radioactividad. Y al final todo electricidad y todo petróleo. El objetivo es que las cosas funcionen, y que cada vez funcionen más cosas. ¿Hay alguien dispuesto a retroceder? Alguien sensato no. La demanda crece y nadie repara en ello cuando conecta un aparato o cuando enciende la luz. Todavía no está prohibido encender la luz de casa, ni poner la televisión, o la calefacción. Pero, tal vez, nos lo lleguen a prohibir. ¿Hay alguien que lo dude? Por ahora no se apuren, porque hay un triángulo omnipotente: Progreso-Economía-Poder. El Poder se pliega a la Economía, y ésta al Progreso. Porque solo progresando se incrementa la Economía, y con ella crece el Poder. Pueden jugar toda la tarde con los tres lados, verán que divertido. No obstante, tiren de Pitágoras porque no es un triángulo equilátero. Para complicar más las cosas.
Y para acabar, por hoy, E=MC2 sigue siendo irrefutable. Lo dijo Einstein, que murió por la rotura de un aneurisma de aorta abdominal, en aquel tiempo. Si el lucidísimo físico hubiera contado con una prótesis vascular de PTF, un polímero derivado del denigrante petróleo, hubiera podido decir algunas cosas más, y quizás habría callado bocas ignorantes que estos días me están recordando algunos con lo de la central nuclear japonesa a los curas con el SIDA y la homosexualidad. Por cierto, los únicos muertos por accidente de energía atómica en España fueron unos pacientes tratados con radioterapia en el Hospital Clínico de Zaragoza hace unos años, si mal no recuerdo 18 fallecidos. ¿Cerramos también las bombas de cobalto y aceleradores para el tratamiento del cáncer?
Les propongo una iniciativa: retiremos todas las fotos y estatuas, nombres de calles , de plazas, de institutos y colegios que hagan directamente alusión a Einstein, ese malévolo personaje que desentrañó los horrores de la física nuclear y en su lugar pongamos, por ejemplo, egregias imágenes de Al Gore, a bordo de su jet privado y soltando unos chorros de maná ecológico derivado del keroseno quemado en los motores Rolls-Royce del aeronave, empresa en la que invierten (directa o indirectamente) la Reina de Inglaterra, el Vaticano, la mafia rusa, el mismo Al Gore, el Señor Botín, y un larguísimo etc, hasta el cura de Villalpando.
domingo, 27 de febrero de 2011
TIBIAS VARAS
Lo que puede llegar a transformarse, y también a degenerarse, la personalidad y la propia psicología de las personas resulta casi increíble, cuando estos seres se encuentran influidos y sujetos a un entorno potente que les mete en una dinámica especifica de utilitarismo, es decir, que les exige sin cesar un rol determinado y no siempre apetecido. La sociedad, el mundo, la Historia, están llenos de millones de ejemplos. En cercanía, los más esperpénticos, que no los únicos, son los políticos, las figuras mediáticas, o los famosos. Pero sin duda el proceso nos alcanza, en mayor o menor medida, a todos. Me viene a la memoria una anécdota puntual, al respecto, de hace unos años.
Paseaba un sábado de agosto por las elegantes calles de Bagnères de Luchon, en el Pirineo francés, y en estas que me fui cruzando con un grupo de futbolistas que volvían caminando a paso lento hacia su hotel, con sus equipamientos de entrenamiento, algunos embarrados tras la supuesta dura sesión. Eran jugadores del Lleida, que entonces militaba en Primera División, realizando su stage de pretemporada en un lugar de aire puro buen clima y altitud. Me llamó poderosamente la atención el caminar de algunos de ellos, bastante desgarbado, fruto de una peculiar deformidad que se da en algunos profesionales del fútbol: las tibias varas, arqueamiento anómalo de las piernas. En uno de ellos resultaba hasta grotesco, pero lo evidente es que estaba en plantilla y seguramente era uno de los puntales del equipo. Gajes del oficio, como suele decirse, pero lo cierto es que el continuo ejercicio a máxima intensidad, para dar patadas a un balón, defender o meter goles, le habían doblado una parte de su anatomía y convertido en un perfil desaliñado muy similar al de las mujericas que sufren la enfermedad de Paget. Y eso quedaba para siempre.
Algo mucho peor que las secuelas de la alta competición sucede en el orden mental de quienes se exponen, voluntariamente, al mundo de la notoriedad. La carrera por la ambición, o por la consecución de objetivos codiciados, deforma la solidez mental de la mayoría, hasta lo terrible en ocasiones. Cuando menos les priva, para siempre, de un paso elegante en lo humano y en lo ético. No pueden pisar bien y andan mal por lo coherente y por lo sensible. Es posible que en su cama, tapados y antes de dormirse, recuperen un sueño de honestidad y de humildad entrañable, pero en cuanto ponen en pie su cerebro y se relacionan con amigos o rivales, exhiben la fealdad de un discurso taimado y deforme causado por el rol incesante a desempeñar. ¿No sería posible, en lo anímico y en lo mental, mantenerse en un estado saludable y sin deformidades?. Posiblemente sí, pero ello requiere un plus de intelectualidad moral que supone una especie de ejercicio de recuperación post-esfuerzo, un regreso a la normalidad colgando el ropaje de la notoriedad. Lamentablemente, la mayoría de estas gentes no están dispuestas a ese esfuerzo reparador. Prefieren que se les deforme la mente y seguir viviendo de su oportunidad alejados de la llaneza humana más elocuente. Se convierten en seres patológicos sin remisión. Una pena, porque además nos afecta a todos. Lo de esos chavales del fútbol no es nada, solo un símil. Lo peor está en el arqueamiento mental de los nos gobiernan o toman decisiones por nosotros, esos “notables deformados”.
sábado, 12 de febrero de 2011
Juan Antonio Guirado
Hoy, trasteando por Internet, he buscado noticias de mi amigo Juan Antonio y he descubierto que falleció en julio del año pasado. Una gran pena y una gran pérdida, porque él era un genuino de la pintura, un singular e irrepetible. Pero también era muchas cosas más.
Le conocí en Lanzarote en 1985, a través de su compañera, Lali, quien trabaja como anestesista en el hospital Virgen de los Volcanes, yo como cirujano. Con Juan surgió una empatía inmediata. Su extroversión y su transparencia vital me cautivaron, máxime tratándose de un hombre de gran talento y lleno de arte en estado puro. Tal vez esa grandeza explicaba esa sencillez y predisposición, y tal vez por eso cuando supo que me gustaba la pintura me ayudó a pintar mi primer cuadro: un paisaje de la Gería. Nunca olvidaré como me sugería como me dirigía mientras yo trataba de manchar el lienzo, Unos días antes me había acompañado a la tienda para comprar un caballete, un lienzo, pinturas y pinceles, y hasta escribió una dedicatoria en el reverso del caballete, que por supuesto aún conservo y utilizo. Pero además de iniciarme, y hasta de aconsejarme de que me dedicase a la pintura (cosa que no hice por falta de fe en mis supuestas cualidades), descubrí a un hombre integramente espiritual. Me habló de la muerte como una simple puerta que se traspasa sin horror, que él ya había estado varias veces en este mundo, que la paz era el gran activo del alma. Me impresionaba, sí, pero mi adscripción terrenal limitaba el convencimiento. Hasta una tarde en la que Lali me telefoneó, bastante asustada, porque Juan había sufrido un infarto y se encontraba ingresado en una habitación de Medicina Interna. Llegué raudo al hospital y, en efecto, el electrocardiograma y la analítica lo confirmaban sin dudas pero...su aspecto y su estado de ánimo lo desmentían. Nunca vi cosa igual, era como si el percance estuviera fuera de él, hasta el punto de que se incorporó de la cama para buscar algo que darme, creo que un boleto de la Primitiva para que se lo llevase a sellar, y en aquel momento el monitor registró una salva de extrasístoles temibles. El grito de Lali fue inmediato y mi angustia al unísono, pero él seguía a lo suyo sin inmutarse, sin sentir alteración alguna, desdeñando nuestro horror. Increíble pero cierto.
Al cabo de unos meses yo dejé Lanzarote y nos mantuvimos en contacto unos años. El volvió a Los Villares y más tarde a Mojácar, según he leido en el obituario. Le he recordado muchas veces, sobre todo por su autenticidad pictórica y su creencia profunda en el Ser Superior que a mi se me hacía difícil de entender y a él muy fácil. Con él pude compobar que existen seres inmensamente profundos mucho mas allá de nuestra cicatería mental, que son mucho más libres, mucho más amables, y mucho más sensibles que la mayoría a la que pertenezco.
Pero lo insólito, lo misterioso, es que Juan moría un día de julio de 2010 y ese mismo día yo entraba a visitar el convento de La Porciúncula, en S'Arenal (Mallorca), (véase una referencia anterior en este blog personal), y ese día sentí un extraño soplo de fe. Un año antes, en 2009 pasé una semana en el Cabo de Gata y estuve muy cerca de Mójacar (yo sin saber que el residía allí), y lo mas sobrecogedor es que esta mañana...antes de conocer la noticia... he estado tratando de escribir unos versos para una canción sobre pintores. Me da que pensar todo esto.
sábado, 29 de enero de 2011
LAS TRES LLAMADAS
Ha hecho tres llamadas desde Schiphol. La primera a su hijo. La segunda a su amante. La tercera a su marido. El avión tiene una avería y han desembarcado a todo el pasaje. Le da detalles de la situación, al hijo. Pasan las horas y el avión no vuela, se cancela el vuelo de Vueling, valga la redundancia. La mujer es madura y obesa, lleva el pelo corto y viste de negro, cómo no. Ha perdido, negligentemente, su figura, su elegancia, su caché, en una diáspora de aplazamientos para la acción y los propósitos. Y así, en un letargo sedicioso, se ha rellenado de monotonía, kilos y kilos de redondez centrípeta e, inevitablemente, ha contraído un síndrome de amargura mórbida hasta que al fin se ha echado un amante en Flandes, para recibir un placer que se adivina de pocilga sudorosa, lejos de su casa, de su entorno, sin rastros ni pistas, en una clandestinidad casi perfecta. Casi. La segunda llamada es al amante, para comunicarle que queda un tiempo añadido al partido, que la llevan a un hotel con cargo a Vueling y que le apetece un último ataque a la heroica en busca del gol del empate, o algo así. La avidez de esa mujer no deja dudas, a pesar de que uno la hacía más morigerada, más hipotiroidea o más cristiana, a primera vista. Las maletas no aparecen en la cinta, son las secuelas de la modernidad. Desde la 15.30 la avería tiene en jaque y reclusión a 182 pasajeros y entonces, en ese hastío de laboratorio nazi, hace la tercera llamada, al marido. Escuetamente le cuenta lo de la cancelación, lo del vuelo al día siguiente y apostilla con un “así te dejo un día más de tranquilidad”. Y cuelga. Su rostro resplandece y la noche cae sobre el aeropuerto. Sin comerlo ni beberlo, por el mero hecho de estar allí he descubierto una procelosa circunstancia, o no tan procelosa, de cuernos. Pero el mundo sigue y las apariencias siguen engañando, y la infidelidad se sigue cotizando en bolsa, aún con crisis. A mi juicio esta historia no tiene nada de romántico, qué lástima, ni el mundo actual tampoco